La detención por parte de la policía estatal preventiva de un presunto delincuente que portaba armas, derivó en el aseguramiento de un narco-bodega con más de 10 toneladas de químicos -al parecer acído tartárico- en la capital del estado, Chetumal.

Derivado de un reporte de la policía estatal preventiva, el Ejército y la policía judicial lograron asegurar una bodega clandestina ubicada en la calle Salvador Alvarado Número 475, de la colonia Adolfo López Mateos.

Rafael Matos Leal, comandante de la Policía Judicial en el sur del estado declaró que con el reporte lograron encontrar 500 bultos de 25 kilos cada uno de un polvo que desprende un fuerte olor a ácido, así como unas mil 300 cubetas de 19 litros de la misma sustancia.

Señaló que este material cuenta con algunas leyendas, pero no determinan la composición de contenido y presuntamente fueron importadas. También se encontraron otras cubetas con líquido no identificado. Así como varias cajas con grandes volúmenes de papel aluminio.

Las autoridades ministeriales aún desconocen quien es el propietario del inmueble que está situado a unas cuadras de la Casa de Gobierno.

La policía Judicial del estado y el Ejército mexicano mantienen custodiada la narco bodega en la que fueron encontradas unas 10 toneladas de químicos y gran cantidad de papel aluminio, con lo que autoridades suponen que el lugar funcionaba como laboratorio para crear estupefacientes.

Varias decenas de efectivos, entre militares, judiciales, policías preventivos y agentes del Ministerio Público, se encuentran en el lugar de los hechos.

Víctor Rafael Matus Leal, director de la Policía Judicial en el sur del estado, adelantó que han iniciado las investigaciones para determinar qué clase de químicos son los encontrados en la bodega y el uso que les podrían haber dado, así como el tipo de droga que habría sido fabricada a partir de estos activos.