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CICLÓN JANET. 1955

04.08.2010 00:47

CICLÓN JANET DE 1955 DESTRUYE LA CIUDAD DE CHETUMAL.
Recuerdan a 187 muertos por el paso de ‘Janet’, en 1955

 
 

Silvia Hernández
El Universal
Viernes 28 de septiembre de 2007

CHETUMAL, QR.— El recuerdo del huracán Janet, que azotó hace 52 años, está tan vivo en Quintana Roo como el de Dean, que impactó el pasado 21 de agosto, afirmó Ignacio Herrera Muñoz, cronista de la ciudad de Chetumal.

La mañana de ayer, las autoridades del municipio de Othón P. Blanco realizaron una ceremonia en el panteón y colocaron una ofrenda floral en recuerdo de ese trágico día en que el huracán Janet irrumpió la tranquilidad y el desarrollo del sur de Quintana Roo, dejando muerte y destrucción.

El cronista de la ciudad recuerda esa mañana del 28 de septiembre de 1955, cuando todo era una estela de destrucción y muerte, y él tenía 19 años.

En su discurso mencionó que el profesor Santiago Pacheco Cruz, en su libro Janet o la tragedia de Chetumal, habla de que fueron reconocidos por familiares o amigos 187 muertos, pero la estimación es que la cifra fue superior a 400.

“Janet mató a mucha gente, destruyó Xcalak y la parte costera del sur del estado”, señaló.

Herrera Muñoz recuerda que el Janet se llevó parte del agua de la Bahía de Chetumal, al igual que pasó en 1998 con Mitch, que amenazó al sur del estado, pero finalmente pegó en Centroamérica.

“Este ciclón es considerado uno de los más fatales y devastadores del siglo pasado”, agregó.

Casos insólitos

Cada huracán deja algo en particular que la población no olvida, en el caso de Janet, cómo olvidar la bandera que atravesó un árbol, de la cual existe una replica en la Explanada de la Bandera —parque principal de Chetumal—, la casa “voladora” y el estanque de concreto que se entorchó en una palmera.

La casa voladora existe, es de madera y lámina de zinc, está en la calzada Veracruz esquina con 22 de Enero, en el centro de la ciudad.

La anécdota es que fue arrasada 500 metros de su ubicación inicial, con unas 25 personas adentro, durante el impacto de Janet.

“Dean nos hizo rememorar a los que fuimos testigos de Janet, ese trágico amanecer del 28 de septiembre, pero con la gran diferencia que en esta ocasión no hubo ningún muerto, sino miles de árboles tirados”, señaló.

“Chetumal es un inmenso cementerio”; “El ciclón Janet arrasó Quintana Roo, sembrando la muerte y la ruina”; “La ciudad de Chetumal, capital del territorio, da la impresión de haber sufrido un inmenso bombardeo”, fueron algunos de los titulares que consignaron medios nacionales sobre esta tragedia, recordó el cronista.

El también profesor de primaria reconoce que gracias a la modernidad, hoy, esos meteoros son identificados desde su creación y los sistemas de protección civil se han ido perfeccionando, lo que ha permitido disminuir el número de muertes a causa de un huracán. 

 

 

 

 

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